Convulsiones, el síntoma de la epilepsia.
¿Realmente sabes qué son las convulsiones? Cuando pensamos en convulsiones nos imaginamos a alguien que se mueve bruscamente, pero no es el único tipo de convulsión.
Se pueden clasificar en dos ramas: Focales y Generalizadas.
Las Convulsiones Focales pueden ocurrir con pérdida del conocimiento o sin ella.
Las Convulsiones Generalizadas se producen en todas las áreas del cerebro y desencadenan crisis de ausencia, tónicas, atónicas, clónicas, mioclónicas, tonicoclónicas.
Convulsiones Focales
Con alteración de la conciencia: Puedes mirar fijamente en el espacio y no responder con normalidad a tu entorno o realizar movimientos repetitivos, como frotarte las manos, mascar, tragar o caminar en círculos.
Sin pérdida del conocimiento: Pueden alterar las emociones o cambiar la manera de ver, oler, sentir, saborear o escuchar, pero sin perder el conocimiento. También pueden provocar movimientos espasmódicos involuntarios de una parte del cuerpo, como un brazo o una pierna, y síntomas sensoriales espontáneos, como hormigueo, mareos y luces parpadeantes.
Convulsiones Generalizadas
Crisis de ausencia: A menudo ocurren en niños y se caracterizan por episodios de mirada fija en el espacio o movimientos corporales sutiles como parpadeo o chasquido de labios. Pueden ocurrir en grupo y causar una pérdida breve del conocimiento.
Crisis tónicas: Las crisis tónicas causan rigidez muscular. Generalmente, afectan los músculos de la espalda, brazos y piernas. Pueden provocar caídas.
Crisis atónicas: Las crisis atónicas causan la pérdida del control muscular, que puede provocar un colapso repentino o caídas.
Crisis clónicas: Se asocian con movimientos musculares espasmódicos repetitivos o rítmicos. Afectan el cuello, la cara y los brazos.
Crisis mioclónicas: Generalmente aparecen como movimientos espasmódicos breves repentinos o sacudidas de brazos y piernas.
Crisis tonicoclónicas: Son el tipo de crisis epiléptica más intenso y pueden causar pérdida abrupta del conocimiento, rigidez y sacudidas del cuerpo y, en ocasiones, pérdida del control de la vejiga o mordedura de la lengua.
La causa más común de las convulsiones es la epilepsia, aunque existen otras causas, como:
Falta de sueño.
Fiebre alta.
Bajo nivel de sodio.
Algunos medicamentos.
Traumatismos craneales.
Accidente cerebrovascular.
Tumor cerebral.
Algunas drogas.
Abuso de alcohol durante momentos de abstinencia o de extrema embriaguez.
Comments